lunes, 22 de marzo de 2010

Virgilio el farero

Un día me levanté y no estaba cansada. Disfruté de una ducha larga y derrochadora y me preparé un buen desayuno. Salí a comprar el periódico para pasearlo debajo del brazo por el paseo marítimo. El mar en calma y la marea baja invitaban a recorrer la playa descalza. Así lo hice. Agua fría, conchas rotas, algas, sal, y a lo lejos, el faro.


Cuando en una historia aparece un faro, siempre me siento fascinada. Es un elemento misterioso, guardián de día, guía en la oscuridad, un testigo mudo de lo que va a suceder o confidente de lo que ya ha sucedido pero aún desconocemos.

Virgilio es un nombre perfecto para el farero que imagino ocupa este faro. Sin embargo, no sé mucho de él. ¿Qué has oído tú?

9 comentarios:

  1. Virgilio tiene el pelo muy largo que casi se le une con la barba,¿qué oculta?, la gente comenta que sale por la noche y pasa horas sentado en las rocas sin hacer nada, un día José el pescador dijo que lo había visto llorar...
    Por cierto, dáme tu dirección que tengo una cosa para tu ratón.
    Besos.
    Ana.

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  2. Pues yo me lo imagino, en honor a mi enana, que tiene obsesión con ellas, guardando el secreto de las sirenas... Si, si... las ha visto y ha compartido con ellas sus escapadas para ver a los humanos...

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  3. Nadie lo ve nunca y es porque sólo se asoma cuando la marea viene a estallar en el rompeolas.
    Los más viejos dicen que su hijo se desvaneció con la espuma que baten las olas una noche en la que se durmió y el faro no lanzó sus redes de luz.
    A veces canta bajito, como si alguien lo fuera a oír, está solo y no lo sabe, tampoco sabe reir.

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  4. Y cuando la luna tiñe de plata esa mar,compañera y muda,Virgilio desciende de su reino,su refugio,y sumergido en las gelidas aguas,recuerda que un dia,fue feliz.
    Y aunque es cierto que,como dicen,el dolor robo su alegria,una extraña mueca asoma en su rostro.
    Tal vez una sonrisa?

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  5. Al anochecer Virgilio siempre como hace cada dia desde ya no recuerda cuanto tiempo, desciende las escaleras de ese faro que es su hogar, muy despacito hasta llegar al rompeolas.... se queda quieto, parado casi inmovil escuchando el ir y venir de las olas a lo lejos. Espera esperanzado que el mar le devuelva aquello que una mañana de verano le quito, sin pedirle permiso.

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  6. Estoy llorando, además de por la historia, por lo precioso que es leer una red de amistad y buenos sentimientos que la idea de una persona genial ha conseguido crear con cinco comentarios de un blog.

    ....Virgilio es feliz a pesar de todo. En su cabeza solo quedan bellos recuerdos de momentos compartidos con su niño, que le está esperando en el cielo con los brazos extendidos y una enorme sonrisa inocente. Esta noche el faro no se enciende. Virgilio está dormido. Y lo estará mañana y al otro.
    En el cielo hay una plaza libre de farero. Y se acaba de presentar un brillante curriculum de un candidato con experiencia, que viene con hijo incorporado, no pasa nada, también hay un montón de plazas en el cole de ahí arriba.

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  7. En el pueblo,saben que Virgilio se ha marchado,y que no volvera.
    Echan de menos esa luz,monotona,salvadora,que el farero,noche a noche, se encargaba de vigilar.
    Lo que nuestro huraño Virgilio desconocia,era que los lugareños deseaban que el permaneciera en su reino,como si aun hiciera falta ese faro,esa proteccion.Aunque hacia mucho tiempo que los barcos ya no necesitaban de su ayuda.

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  8. Nunca me perdonare en la vida lo tarde que llegue, no he conocido a Virgilio, tan solo he encontrado el faro vacio, el viento soplando por entre las rendijas de la madera y el suave golpeteo de la lluvia en los cristales del faro, me queda el recuerdo de los que le vieron, de los que tuvieron la gran suerte de compartir su tiempo con el, con esa imagen me quedo.

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  9. ¡ precios, me ha encantado lo que habeis escrito todas !
    ¡ ENHORABUENA, chicas !

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